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La elfa se entristeció al escuchar tú regaño. ¿Y cómo no culparla?, en un impulso de egoísmo sobre el humano; está no permitió que el chico se subiera en la misma cama, no estába dispuesta en compartir a pesar de que por ley esa cama y el lugar era pagado por Judas. Con una pizca de vergüenza no tuvo otra elección más que de manera inmediata enterrar su cara sobre las almohadas. Así permanacio hasta quedarse profundamente dormida, al igual qué el chico... Solo eras tú despierto a altas horas de la madrugada.

https://youtu.be/a-wNNKXN0Hc?si=CpUg28pg83mBriwr

Y en la más profunda oscuridad, con vela en mano intentaste checar el libro desacomodado. Por desgracia tuya, el libro había sido acomodado entre el tumulto de libros que había en la estantería. Todos eran prácticamente iguales a simple vista; enciclopedias con forrado de piel y de un homogéneo color ocre oscuro, por lo que se terminó mezclando entre los demás.

Una pena...

Ahora al menos sabías que en dicha habitación era muy frecuente que las mucamas estén arreglando el lugar de manera constante.

Sin embargo eso no era lo único que tenías que revisar, ¿Verdad?

Saliste al corredor.

Y en medio de la oscuridad fuiste a revisar la cabeza del oso. **Te seré sincero. Quda medio rara está acción pudiendo hacerla antes cuando la curiosidad está más que viva.**

El pelaje y la textura de la cabeza del animal eran auténticos. No era gamuza, ni ebras sintéticas de pelo. Quienes sean los responsables de éste trofeo de caza eran excepcionales, y muy habilidosos para haber conseguido la cabeza cersenada del aquél animal.

Con el simple roce de tús dedos hiciste que la cabeza se desprendiera de su recuadro que lo mantenía enmarcado en oa pared. Era ahora o nunca, debías atraparlo de manera inmediata para no hacer ningún tipo ruido que alerte a tus compañeros y personas debajo de está habitación. Pero lo que realmente te llamó la atención fueron dos notas escritas en una hoja color mate.

Tras haber colocado la cabeza en su lugar, recogiste ambos trozos de hoja para leer su contenido.

''Quien no conoce su historia esta condenado a repetirla.''

En el reverso había una firma. Podría ser cualquiera... Aunque sospechoso este oculto detrás de dicho adorno. También había otra nota más extensa en una hoja más grande:

''Lo último que recuerdo es que morí a causa de un cáncer terminal. Sin embargo aparecí debajo de la arena de una playa cercana a unos kilómetros de distancia. Pensé que era mi último sueño antes de morir, pero más tarde descubrí qué estaba despierto e inmerso en otra realidad... Quizás Dios me dió otra oportunidad.'' -Oppie.

Quedaba a tú elección guardarlas en el interior de tú diario. Ya sabes colocarlo en medio de tus hojas. O simplemente devolver dichos escritos en su lugar. Aunque de inmediatamente sabrán que alguien desprendió la cabeza del oso...

Ya era noche, y hasta los más formidables guerreros debían ir a descansar.

Mañana será otro día.
**Pues ahora es Lunes kek.**  **Ay, kekeo contigo. Yo ya iba dar skip. Pero con lo que te conté es mejor que hubieras hecho esa acción más tarde que nunca.**
>>114740
>>114655
https://youtu.be/4wcLQZybBLA?si=ASiBzzqnLcNo169j

Tan problemático...

No es sencillo coexistir entre humanos y seres fantásticos. Quizás ese sea el sentimiento que te hizo conectar o empatizar bien con la sirvienta de actitud ponsoñoza. Sin embargo, eras tú contra quienes no entendían tú ideal.

...

Otra noche más estando vivo. Otra noche más asegurando tú perímetro.... Aunque mediocres pero efectivas; cada mañana era encontrar algún roedor comestible debajo de esas trampas como liebres o jabalíes. Eso simplemente era fantástico, esté bosque te proveía de alimentos y recursos.

En la entrada del pueblo y el bosque era demasiado tranquilo. Sin embargo desde ayer eso cambió de repente y de manera contundente.

Fué el horror en su máxima expresión.

Tú lo viste a la distancia; fuiste testigo en primera persona de un sujeto con pintas de guerrero demoniaco contra una bruja. El espectáculo fué abismal, simplemente sorprendente, pero a tús ojos fué una validación ante el peligro de éstos magos. Viste el descenso de meteoritos y ataques mortíferos solo hechos apartir de un conocimiento enfocado en la magia negra. Era como presenciar la batalla de dos grandes reyes demonios cerca de tú hogar.

Por fortuna fuiste salvado por la Heroína Lunar. Tus pertenencias no sufrieron ningún percance gracias a que usaría su agilidad para resguardarte en un lugar seguro junto con tus cosas.

Ahora en la actualidad que vuelves a mirar el cielo, y vuelves a poner tús trampas tienes la imperiosa necesidad de estar al pendiente de tu seguridad. Mañana será otro día, y uno mejor.

Tan pronto cerraste el ojo y de inmediatamente lo abriste siendo de día. Los gallos están cacareando dando la bienvenida al amanecer... Era momento de hacer ejercicios, vestirte e ir por un poco de agua.

Observaste que no había ningún animal apresado en tús trampas. Eso era malo por qué eso significa no desayunar.

Caminaste a la orilla del río a unos metros de Elaf y escuchaste el cantar dulce de una chica. Simplemente hermoso e hipnótico... Trataste de averiguar dónde proveía aquél angelical canto, y fué donde te diste cuenta que eras tú solo, sin embargo diste en el clavo el canto provenía dentro del cuerpo de agua. Sí no lo habías visto a simple vista era por qué era diminuta. Te habías encontrado con la Hada del lago.

Se estaba bañando. Así que lo mejor era irse a otro lado a recoger agua, aprovechando que aún no te había visto era momento de salir de ahí... O ir a la otra orilla del lago a recoger agua fuera del rango de vista de la pequeña.

Ahora solo quedaba ir al interior de Elaf.

...

El Sol amaneció y le dió la bienvenida a Melusine, Judas y a Durian. Los rayos solares les deslumbró directamente en sus ojos obligando a que los tres despertarán para desayunar.

Eran las 10:00 de la mañana en punto.

Ahí estaba la camarera quién había traído un enorme pan de plátano y algunas frutas picadas en compañía de unos cereales. En conjunto de unas tasas de café y té. La elfa escogió el té... Los demás quedó a su elección.

Antes de comer, la elfa agradeció por el desayuno, y de inmediato se puso a devorar.

Mucama: "Fué un día bastante largo ayer ¿No?" Cuestionó al grupo quienes estaban ahí comiendo con tranquilidad. "Está mañana desde muy temprano, el cantor anuncio a través de un corrido las nuevas, nuevas. Acaba de morir un hijo de duque y la ciudad de Elaf no tiene otro remedio que asistir a escuchar las palabras de la duquesa"

Con dicho aviso la mucama espero que acabarán su desayuno para retirarse. El sabor del pan era dulce y a la vez tenía una textura esponjosa en el paladar... Bastante rico en compañía de algunas frutas y su sabor ácido de algunas ballas y frutos rojos.

Afuera se escuchan los sonidos de un tumulto fúnebre. Vários aventuros estában reunidos escuchando al cantor. Lo que había sucedido era una tragedia que conmocionó a los aventureros del lugar. Todos estában reunidos en el gremio, que inclusive había cola para poder entrar.

Simplemente tenían que bajar para ver qué estaba pasando y del como el cuerpo de Bill había sido recuperado de las alcantarillas. De inmediato salió una mujer peliazul, de cabello corto, y ropas negras, lamentando lo sucedido. Parecía querer tomar algo aire fresco tras haber estado dentro de dicho establecimiento.

Era momento de bajar e ir entregar la Durandal a sus dueños... Cómo también esclarecer lo sucedido.

Abajo también se encontrarían con Alexander quién se adentro al pueblo para encontrar un escudero. Algo difícil considerando el día, además del luto que se sucita él dia de hoy en honor al caballero del grifo.

Melusine: "Parece sér que hoy tampoco será un día cualquiera..." Comentó algo nerviosa. Gracias a su visión afilada, ella se percató de que los ojos de dicha mujer están clavados sobre el grupo, quizás ese muchacha sea familiar de Bill.

Justo en el momento que estában afuera de la posada se encontraron cara a cara con Alexander. La elfa fué la primera en saludarlo... A pesar de lo bastante incómodo que fué para ella interactuar con el.

Melusine: "Oh... Alexander, ¿Que haces aquí? Pensé que estarías adentro del gremio dándole la despedida a Bill"