y que para él la novela es historia
te lo aseguro a fe de caballero
y que el mejor día
y en la puerta el dueño
y baja de un salto
aquí estoy ya no me conoces no me conoce usted soy andrés
de tú de tú el buen viejo
si tu mamá pudiera verte
a cada paso me decía
si ya no viven donde antes
andrés prosiguió están muy pobres
tienes que estudiar mucho todavía pues si no es mucho
aunque me quede sin nada al fin
y sin dejarme contestar pasó a otra cosa
cerca para que vea yo bien al señor de la casa
peor que si los tuviera aquí me tienes
que ella no creía nada de cuanto le decían acerca de su enfermedad
y que con el tiempo y el cuidado habían desaparecido
vas a ver esto muy triste
nos contó que tenías mucho miedo
estaba yo en la casa de los míos
que puso en mis manos don basilio
como la expresión de la más dulce esperanza
dueño de todos los pensamientos
aquella página aquel nombre que no gusto de repetir
me volví del otro lado y seguí durmiendo hasta las ocho de la mañana
yo hijo como tu abuelo chocolate y nada más chocolate bueno eso sí
muy buena muy buena cómo un pan de gloria y te quiere mucho
se trataba de un precioso servicio de café
pues bien como te iba yo diciendo prosiguió mi tía
y te quiere mucho
dios le dé un buen marido
qué qué dices que ya tendrá novio
en aquellos momentos llegó la joven
volvió el rostro levantó la cabeza y miró hacia la jaula
y dice que nadie las hará mejores
qué tiene eso dice que si ya tienes novio
dijo la señora necesita de mí
en lo dulce de su trato
se dijo así me lo contó una vez don basilio
hasta la hora de la muerte
al jefe de la familia
de todo esto nada se sabía en la ciudad
pasaron los días los meses y los años
has que quieras estás en tu casa eres como el jefe de la familia
dime estás loco no eso será otro día
que es tan bueno con nosotras a don basilio
sin duda había salido a verme
corta en dos partes la ciudad
fuente de alegría en todas partes
la vida como las cosas y las personas
a los dos o tres años de haber llegado
a lo menos de un modo común y corriente
de buena fe que no las hay mejores
cuando no tenía un real
de la llegada de la noche
un chico abrió la puerta
pasa muchacho vamos a la sala
muchas veces muchas os he hablado de él
este sí que no me daba
vamos prosiguió os doy la mañana
las mil y mil voces
estoy ya muy viejo
cosa que parte el alma
y que el buen anciano
darle cuanto quisiera y comprar para él si tal cosa fuese posible
qué hemos de hacer hijo mío
oye lo que más me duele
lo que me llega a lo más vivo
por eso no me quieren
nueve a la salida me detuvo en la esquina unos cuantos minutos
y de la peor manera
igual como la dejé diez años antes
la plaza mejor dicho el centro de ella
la caída de las hojas
no tuve valor para volver el rostro
al entrar en mi casa
y bajó los ojos
así durante algunos meses
y así pasó un año y buena parte de otro
sin que ella la pudiese ayudar
y hasta de lo más necesario
no había más que ponerse a trabajar
en qué y cómo sólo dios lo sabía
el caso era trabajar
le tomó a su servicio
para qué no me hace falta la familia
entre ocho y nueve de la mañana
en la cual escribió andrés
no me creía yo extraño en aquella casa
volvía yo a mi cuarto
muy natural en quien había tenido tanto que llorar
volvía yo a la hora del desayuno
la doncella solía sentarse a mi lado
flores de mil clases y colores
si ya me la sé de memoria
miro la vida de otro modo
y vivo tranquilo como vive toda buena persona
quien los tuvo por buenos y muy buenos
qué cosa lo que dice la voz
han creído que usted es el autor
andrés había hablado ya con el abogado
me ocurrió averiguar si alguien había puesto los ojos en ella
no es ella capaz de jugar con el amor
que le hacía versos otros
un pueblo no se da a sí propio
sólo porque así lo quiere
para ella cualquiera forma de gobierno es buena
o lo que es más seguro a la buena del diablo
y aquí paz y después gloria y adiós
está seguro de que le hará caso
y que decían algo de mí
ya te dejo preparado el campo
como tantos viejos que yo conocía
puedo pasar pase usted
aquí tenemos mucho trabajo
si quiere usted trabajar
es lo que deseo
y a decir verdad ninguno me ha dejado contento
pero sólo de tiempo en tiempo
espero que usted en memoria de mi abuelo
allí tiene usted lo necesario
pero en fin la de usted es clara y hermosa
visto desde el punto en que yo estaba
decía yo el nombre de la dulce niña
viene a mi memoria el recuerdo de aquellos días
y de mis ojos que ya no saben llorar
de quien llama las cosas por sus nombres
al llegar me la encontraba yo en la puerta
qué me trae usted lo más hermoso que pude hallar
por aquel beso hubiera yo subido entonces
listo diecisiete de noche me quedaba en casa
una noche la tía se quedó dormida
ya dije que no lo he de decir bueno
y en cuanto a lo del novio
si alguna vez ve usted a esas niñas con vestidos buenos
es decir con vestidos que no parecen de pobre
es porque yo sólo porque es preciso lo digo
sabe usted lo que me dijeron esta mañana
es usted muy curioso no tengo yo la culpa
usted despertó mi curiosidad
porque es rubia y estaba vestida de color de cielo
cosas mías por decir algo
ah y sí que sí pues
es el caso que una señorita muy guapa
bien tomó a usted del brazo
y qué y salimos
y qué más y me preguntó con mucho interés
que vive en esta casa
y que tarde a tarde
en un asiento de la plaza
ella prosiguió y oyendo tocar a una señorita que vive allí
la primera la principal y que vale por todas
ella me dirigió una mirada profunda
la otra tarde me dijo ay
a dónde va usted me decía
más de una vez me volví rápidamente
andrés tomaba asiento lejos de nosotros
como individuo de la familia
cómo si le tuviera yo delante me parece que le veo
en este momento creo verle aquí
del otro lado de la mesa en que escribo
y estuvo ese día de muy buen humor
esa sí exclamó la buena señora
esa sí me gusta tan bonita
ya sabes que para esas cosas tengo yo buenos ojos
y más bonita y de muy buen trato
y por eso te queremos mucho
pues oye ahora uno no seas como tantos otros muchachos de tu edad
no hay más que un amor
lo sé bien lo sé bien yo sé lo que te digo
ya te entiendo piensas que eres pobre
y aunque no lo seas pobre
muy pobre más pobre de lo que eres
vas a decirme que eres pobre
pues ya lo ves
y deja que el mundo diga lo que quiera
ahí se están en la sala
aquello no podía seguir así
y mi hombre no daba señales de vida
este mundo es un valle de lágrimas
y ella ha sido para mí
cerca de ella estaba el caballero que iba a ser su esposo
sacó del bolsillo una carta y me la dio
mañana no tienes razón mañana es día de fiesta
y quiso levantarse y caminar por la habitación
en esto llegó el doctor
cómo ve usted a mi tía mal muchacho
la enfermedad sigue su curso
ya verás que no puedo venir a esta casa por interés
no entiendo nada de esas cosas
de seguro que será poco
no todo sale a medida del deseo
cuál no servir para el caso sí
y aunque así no fuera estás obligado a no perder la oportunidad
eso me toca a mí
por nada de este mundo
de día tiene usted mucho que trabajar
no no el día que yo no quiera hacerlo
el señor cura dijo el otro día
como persona de la familia
pero el paseo más hermoso es el dos de noviembre
el gritar de los chicos
no podía suceder de otra manera en la ciudad de las almas tristes
ni una nube en el cielo
y ya no puedo con mi humanidad
me gustan los jóvenes como usted
mañana me tendrá usted por allá
bien bien a las nueve
a las nueve en punto
adelante joven dijo en alta voz
no hay aquí mucho trabajo pero bueno es que sepa usted
vendrá usted a las ocho de la mañana
hora de ir a comer
pero esto no sucede más que de tarde en tarde
entonces pide usted las llaves a las niñas
así lo hice con otros pero con usted será otra cosa
me parece que para empezar es una cantidad
y con las manos atrás
y no la dijo
en los cuales ninguno ponía mano
ni lo bueno es nuevo ni lo nuevo es bueno sí
que caía hasta cerca del suelo
uno igual había en mi casa
con el sombrero entre las manos
que dios tocaba a juicio
los primeros días me le encontraba yo en la esquina
al discreto que al tonto
nos dice lo que no queremos que nadie nos diga
haré que las digan en italia
y prosiguió en tono dulce
este le quitó la palabra tendrá con eso lo suficiente para comer
eso que hace usted es lo que hacen todos aquí
trabajo para toda la vida
cuál no hablar del asunto
que falta lo mejor sale el pobre muchacho de aquella casa
por la noche nadie sabe qué hacer de su persona
y las que no lo hacen
los muchachos no tienen en qué pensar
se van por esos mundos de dios
ustedes saben lo que sigue
eran las siete de la noche
estoy contenta sí porque de algo a nada
pero pronto pude observar que no gustaba de quedarse sola a mi lado
me dicen que me amas
la que despertó en mi alma eso sentimiento
es ahora esposa y madre es feliz
pongo en tus manos mi corazón
levanté los ojos para mirar a la doncella
qué hacía usted verla a usted
la joven comprendió al punto lo que iba yo a decirle
me parece que soy muchacha
no son como antes cuándo pero verás cómo te gustan
creía yo que el verdadero amor era premio y palma de la bondad
arriba ya es hora
si has de ir con nosotras
caído sobre los hombros el abrigo
dejaba ver su hermosa frente
terminado el trabajo a eso de las cinco
si acaso y eso de cuando en cuando
por la tarde al patio
yo daba el brazo a la doncella
es una historia muy triste
así fueron siempre todos los de la familia
de ciertas cosas no se hablaba en mi casa
no era hermano de mi madre
nadie me contó esa historia
bueno es que lo sepas todo
sin que la historia de su familia
no sé si soy buena o si soy mala
me basta saber que te quiero
y que te quiero tanto
mira que si no me los das no tendrás flores en tu mesa
yo para mal contar
mi madre dios la tenga en el cielo
que decía papá y mamá
no he olvidado a mi padre era un caballero alto
salimos a decirle adiós
y nosotras nos quedamos esperando su vuelta
un día recibió mi madre una carta
mi padre nos llamaba
un día mi mamá se quejó diciendo que le dolía la cabeza
entonces mi mamá volvió en sí
y de allí me llevaron a la cama
me dijeron que estaba en el cielo
el autor de mis días había muerto también
luego me llamó y tomando entre sus manos mi cabeza
y esa es la triste historia de tu vida a qué decirme
pero el corazón me grita habla habla pues
tú mismo lo has dicho muchas veces
tú puedes ser feliz
estoy segura de ello
cuándo y cómo dijiste una vez
lo diré de una vez
ya sabes quien soy
pero en los míos
ya lo sabes todo
no salía yo a la calle más que a las horas de trabajo
cada día más enamorado de ella
no puedo ver el famoso cuadro sin recordar a la doncella
a las veces después de pasar en mi cuarto largas horas
salía yo con el papel en la mano
como nadie se la esperaba
ahora no ha de ser así
se soltó hablando pues sí
a la vista de objetos que fueron para mí
con qué cuidado saqué de la gran caja
pero la dirigió y todo salió a medida del deseo
todo estaba listo al fin del día
se apoyó en mi brazo
a las ocho ya estábamos en la mesa
y ya es tiempo de ello tiene largos los setenta y cinco
y no hay temor de que me den un mal rato
haz lo que él te diga
y siento que se me hace pedazos el corazón
no te dice claro en esa carta
ganas mucho en mi cariño
será lo que dios quiera lo que dios quiera ya no me verás triste
y por cualquiera cosa ya estoy llorando
no no es tarde me dijo la menor
que diga lo que quiera
a lo cual contestó como al señor le ha dado por la música
no lo sabía usted ah sí
vea usted que nos lo dijo persona que lo sabe
y sólo de cuando en cuando
a pedir mercedes para el año nuevo
la pobre niña no volvió a hablar de viaje
venga a cualquiera hora decía la joven que venga
allí pasaba yo horas y horas
tal vez en muchos años
estaba yo enamorado como un loco
no era mi amor aquel amor de niño
objeto de mi primer amor
y tuviera en mí un amigo
a eso de las diez
el cura estaba ya muy viejo
y me puse a pensar
no es verdad contenta yo sí tienes razón
ya preguntó por usted
cuando supo que no volvería yo al colegio
que vaya a pasar conmigo algunos días
y en la noche estará con nosotros
digo bien digo bien muñeca cuando estés allá voy a ser otro
el anciano levantó la cara para verla
tú qué dices de eso pues yo digo
la iglesia no es ya la que encontramos
y todos quieren mucho a su cura
porque allí todo es subir y bajar
para una cosa si es terrible
no puede ver nada fuera de su sitio
la mesa ha de estar bien puesta
así como quien no quiere la cosa
estuvo por allá una semana
no sé cómo pude trabajar durante ese tiempo
volvía yo a casa entre nueve y diez de la noche
era domingo y me estuve en casa todo el día
hasta después de la muerte pues bien
se ha hecho dueño de mi corazón
en la soledad de tu pensamiento
no piensas en mí tienes razón
porque me amas sí me amas con toda tu alma
ya lo sé pero no lo digas
qué negro pero no quiero que llegue
si dios quiere darme algunos meses de vida
ya sabes que esta es tu casa
ya se lo dije al señor cura
a esta pobre casa que es suya
de los demás el que tú quieras
no es verdad nosotras también
me parece que el señor cura ya está en su cuarto
adiós alegría se iba con ella
no sé cuánto tiempo estuve así
me dolía el corazón
porque no quiero verte mañana
no quieres verme no me sería imposible salir de aquí
casi sola en el mundo
verdad que no es posible piensa en mí habla de mí
quiso hablar y no pudo
después de largo rato de silencio hizo un esfuerzo
me pasaba yo largas horas en aquel sitio
con un libro en las manos
muy de prisa llamó a la puerta
eh no me hice esperar
tengo buenas noticias para ti
cómo están por allá pasando no es eso mal vamos
pues mira lo que haces
el otro día llegué y me las encontré llorando
pero ya verás muchacho como todo eso pasa lo que es ahora
qué es eso mira
vamos a ver qué te dice
parece que no los ha tocado la mano del hombre
y eso que estamos todavía en invierno
sólo yo no lo tengo para nada
a cada rato me dan ganas de llorar
verdad que estás triste y que hasta tienes ganas de llorar
te veo a todas horas
pero cuando me pongo triste y con ganas de llorar
no te veo he dado en pensar
papá tomó asiento en una roca
cuánto hubiera yo dado por ver
aunque fuera desde tan lejos
me voy a morir de pena
y tendré que esperar ocho días
y no puedo seguir escribiendo
y así será en lo de adelante
muy nerviosa y necesita cariño y amor
por la ventana abierta de par en par
y de cuando en cuando
no no decían aquellas páginas lo que sentía mi corazón
el sueño tardó mucho en venir
y lo que andrés nos daba
era lo único que teníamos
y eso que la nuestra no era
que también los tiene el rico
te vas y nos dejas es preciso
pero qué hacer ahora que estamos solas
cuando después de tantos años de ausencia has vuelto a nuestro lado sí
andrés hace por nosotros cuanto puede
y el pobre puede poco
le espero a usted el día quince
después se habló de mi familia
de mi abuelo a quien había tratado en no sé qué parte
en esos momentos apareció la señorita
a qué hora hemos de salir después de comer
a menos que tú quieras salir más tarde
y que no volvería hasta la tarde
ah no es difícil saberlo
casa pues de allá salí hace una hora
bajó los ojos y después de un rato de silencio
nada tiene de extraño
ya saben ustedes que los negocios
puede si nosotras estábamos allí
fuimos a pagar la visita
papá decía a cada rato niñas
no la digas interrumpió la morena no la digas
pues lo he de decir
usted qué ha de decir
usted tiene la culpa de todo
allí se está usted horas y horas
él mismo me lo dijo en el colegio
a poco de terminar con ella
lo sé y sé también que por eso no habla con usted
ni le busca como antes
antes tan amigos ahora enemigos a muerte enemigos quién ha dicho eso sí
tiene usted amores con esa señorita no
yo conozco muy bien a las mujeres
como que soy del sexo
ni mucho menos porque el dinero no cae con la lluvia
con lo que tiene usted aquí
aquí está usted mejor tiene usted tiempo libre para todo
no joven no lo que ha de ser tarde que sea temprano
pero aquel dinero me era necesario era pan y vida alegre para algunos días
triste condición la del pobre pensé
volví a contar el dinero en presencia de todos
me pasaba yo el día leyendo
ya me lo imaginaba yo así son las cosas
me alegro de saber la verdad del caso
o lo que es más fácil todavía
escribe bien muy bien no sabía nada cuando entró en mi despacho
y pronto se puso al corriente
después de tantos años ahora que de nadie necesito
ahora que si no soy rico
sin pensar en el dinero para el día de mañana
quise morir morir y no para escapar de mis enemigos
pensé con alegría en la muerte
cuarenta y tres entró la noche llegó la hora de la cena
pero no tengas cuidado no tengas cuidado
verdad ya me parece que te veo
ya he dicho que la vida del colegio
me creía yo persona de experiencia
sólo el cariño me hacía callar
tengo que decirte muchas cosas
qué si tienes dinero dinero para esta semana
pero ya lo sabes
mientras ganas en tu nuevo destino
para que la ropa salga buena
cuarenta y cuatro me levanté muy de mañana
no que la amaba yo con todo mi corazón
con toda la energía de mi alma
y aunque no había muerto en mi memoria
salimos hasta el principio de la cuesta
estoy muy contenta y muy segura de tu cariño
después no me preguntó nada
será mucho te quiero con toda el alma
y me duele mucho que me digas esas cosas tan tristes
y entonces más que en las horas de dolor
no parece sino que tienes poco amor a la vida
dios me libre de ello la vida
como un don del cielo
dices que la vida no es más que dolor no es cierto
no te sientes feliz cuando haces algo bueno
pablo ha de salir a las tres
son las doce y media
aun no he visto si la mesa está lista
dice papá que está muy bonito le ha gustado mucho
cuarenta y cinco estuvo escribiendo hasta después de media noche
las mías no dan ni esperanzas
bien vista la cosa no era para tanto
hija mía no hay más remedio qué hacer no entiendo de campo
y que en mucho tiempo no he de verte
tienes razón la vida es amable
qué quieres así soy así me he vuelto en estos últimos años
sino con mi corazón que es todo tuyo
y que de pronto cuando tenía perdida toda esperanza de libertad
a las veces no creo no puedo creer que me amas
y si pienso en esas cosas no te las diré
me pasaba la mañana en mi cuarto
y el buen anciano hacía un gesto
y serían siempre nuestros compañeros
cuarenta y siete a las cuatro de la tarde ya todo estaba listo
cuando estabas en el colegio siempre que venía a vacaciones
necesita algo yo se lo doy
yo lo necesito el me lo da
cómo dos hermanos pero tía no ve usted que no viene a verme
ni me busca cuántas veces ha venido sí
eso es cierto pero la verdad es que no ha estado aquí
sus padres han sido muy buenos con nosotros
cuando el buen señor es incapaz de semejante cosa
nada tengo que decirte
verás qué bien te va
sería mi amigo ya sabes cuánto te quiero
tú no quieres creer que ya estoy viejo
cuándo te vas mañana no podré ir a decirte adiós
cuando llegué a mi casa a eso de las siete
vaya aquí está todo
me parece que toda está bueno
te gusta te lo regalo
te falta una pistola
porque mañana no podré venir
al entrar exclamó aquí está el hombre vamos a ver
media hora después estaba yo de vuelta
llegó la hora de partir
y salí de la estancia
acaso dentro de ocho o quince días
con ella el traje nuevo
a mi buen andrés muchas cosas
y adiós tía que no hay tiempo que perder
vaya un abrazo señora mía otro a usted
una fría mañana del mes de enero
y desde allí escribir cuatro letras
y a la derecha del dueño de la casa
no ah el aire del campo
esta señora es mi esposa
este niño es mi hijo
y me señaló una silla al lado de la joven
aquí le tiene usted
el niño contestó con una sonrisa
y no dejaba de mirarme
de la buena condición del caballo que me había mandado
papá conoces a esa joven no respondió el caballero pero debe ser muy hermosa
porque tú nos hablas de ella a cada instante verdad
y todos la queremos mucho
no son cosas de niños
no tiene ni padre ni madre
dijo la señora con mucha calma
señor este niño es así
pero en fin como hacía cuanto estaba de su parte
un asiento en nuestra mesa
se detuvo delante de una puerta cerrada
la habitación de usted
esta ventana da al jardín
como usted ve pero está junto al escritorio
de un médico a la antigua
que no era duro de corazón
cosa difícil en aquella tierra
y le dejaron en paz
se volvió sal y agua en menos de diez años
entonces lo mismo que ahora
justicia sin la cual no puede existir la libertad
siempre dispuesto a hacer el mal
día y noche le tengo en la memoria
ya usted ha visto cómo me trata
y todos dicen que soy la más feliz de las mujeres
pero no puedo permitir que sea así
y con este motivo la pobre niña me abrió su corazón
antes de salir el sol
por eso no te hemos escrito
y con voz muy débil
así lo esperaba yo me alegro
ahora te la daré
para todo hay tiempo
ya me lo sé
a poco apareció en la puerta
qué me das por esto un abrazo
es poco un beso
pues entonces qué quiere usted tu cariño tu cariño
muchacho que con eso me basta la señora llegó hasta mí
mi corazón tiene dueño
y quién es ese es mi secreto
y déjame en paz en mi cuarto
vamos a tener unos días de mucho trabajo
y yo tengo que hacerlo todo
ahora no es tiempo de pensar en el novio
y todo tiene que salir de mis manos
son las once de la noche
qué es eso de creer que la vida es mala no
y me dijo que sí
ya sé la que vas a decir
y se feliz ya te lo dije
te lo he dicho muchas veces
y me digas la verdad
nada de cuanto pienso y siento
ya sabes que no tengo secretos para ti
y que cuanto se me ocurre te lo digo
aunque sea en contra mía
y que tengo que ocultar mis lágrimas
no tengo a quien contar lo que me pasa
aunque tú me digas que sí
qué me importa te amo
ni el tono de su carta
la que será tu esposa
la amaba yo con toda mi alma
la dulce niña de mi primer amor
de pies a cabeza se miraban unos a otros
buen partido te cayó el premio
tenemos que hablar con usted
buena suerte y gracias por el favor
por dios interrumpió la hermana
y me fui a mi casa
después de la comida me puse a escribir
no dices que me amas pues entonces
en quien he puesto todo mi cariño
mientras yo sueño a todas horas contigo
y la tuve y el que poco antes deseaba morir
allá en el fondo del jardín
por el contrario debe ser objeto de tu cariño
esta familia me trata muy bien
que la cosa es hecha
pero se trata de su hija
andrés vino a cenar conmigo
se parece usted mucho a él
una vez acaso no lo recuerde usted
usted siguió su camino
ahora estoy segura de que usted también está enamorado
después de un rato de silencio
y fijó en mí sus ojos
así así me miró muchas veces la hermosa niña rubia
objeto de mi primer amor
y se dirigió lentamente hacia un extremo de la sala
y las horas eran instantes cuando estaba yo a su lado
y algo más de lo cual no me daba yo cuenta
me pasaba yo en el escritorio las horas de descanso
bajo los árboles del río
y que la cosa iba mal
yo quiero que estés aquí en caso de una desgracia
y de día en día la veo más débil y caída
es un joven muy bueno
le dije que no y le quinientos uno las gracias
dicen que lo hace muy bien
el pobre de andrés viene todas las noches
mientras él está aquí pase algo en la tienda
más tarde sería preciso ir cuando la situación fuese verdaderamente grave
iba a la ciudad todos los días
al estar a su lado
y me sentía débil como un niño
muy lejos hace mucho tiempo que no la veo
necesito que alguno sepa que la amo
el amor no puede estar escondido
cuando hablo de esa niña no me responde usted
la niña está contenta pues decirlo
no era el mío cómo a mí repitió la doncella
de tú o de usted de usted
me dieron una en la casa la otra en el correo
me pareció muy alegre
eres muy bueno con nosotras
porque la promesa la hice por los dos
no ha venido el mozo en toda la semana
y por acá estamos con mucho cuidado
que es el médico de allá
el domingo me puso cuatro letras
después fuimos a la sala
mi pensamiento y mi alma estaban en otra parte
en la plaza es la fiesta
que será cuanto habrá que ver
me ofreció venir a verla cada tres días
nosotras estamos contando las horas
me fui a la sala
una hermosa noche de luna
ya me parecía verla a mi lado
se había ido la hermosa señorita
aquel corazón hecho pedazos por el dolor
que vive pensando en otro
daban las doce en el reloj del escritorio
allá en el fondo del jardín
nada me dijeron de la rubia señorita
así deben dormir los que tienen una buena conciencia
diez o doce gendarmes y los chicos de la escuela
iba con el traje diario
tiene usted razón me contestó
pero vendrá usted esta noche
y además no necesitaba de familia
con los de tu casa tenía yo bastante
presente hasta ese momento en mi memoria
no tiene usted frío yo sí
será porque estoy muy nerviosa
voy por un abrigo
mis ojos la siguieron
y lo dije quería yo que tuviese usted en mí una amiga
cuando se ama como yo sé amar
se entiende que con alguno que sepa sentir como nosotros
un ser invisible lo murmuró a mis oídos
pero no lo esperaba
la resolución de usted
en cuanto a mí
puede mucho una mujer
le daré mi mano dicen que soy hermosa
mi único amor la pobre señorita bajó la mirada
y ella le ama a usted sí
media hora después estaba yo en mi casa
hoy o mañana vendrá el muchacho
para que si alguno viene no tenga que esperar
desde el día primero voy a descansar
dicen por ahí pero yo no lo creo
está usted nerviosa y por eso se siente usted tan débil
salí del aposento con el corazón hecho pedazos
por fin habló qué dices de eso nada
tía que si por mí fuera
no dejes de venir el domingo aquí estaré
si algo tenemos que me parezca grave
todas las cosas tienen su fin
el estado general de tu tía es malo
anoche estuve con tu tía y estaba muy contenta
siete años de enfermedad ya era tiempo
ahí en la mesa está la lista
diciendo que alguien me buscaba
quién la trae no lo conozco
la muerte voy a verla llegar
acaso ha llegado a esta hora
pero ah la realidad estaba allí
yo conozco muy bien las calles
andrés me recibió en sus brazos
sin saber lo que hacía
allá me siguió andrés
de pronto entró mi tía
me levanté y fui en busca de la carta
cuando seas feliz porque hoy no lo eres
siento que el alma se me va
me llevan por otro camino
a dónde yo misma no lo sé
acaso a servir a los pobres
tal vez no sería yo una buena esposa
y de los cuales tú mismo me has hablado no
los deseos de la joven
y estuvo con nosotros varios días
entonces le contó a mi tía
es feliz creo que sí
la rubia señorita era muy lista e hizo de su novio un marido discreto
en cuanto a mí
y no espero de ellos lo que no pueden darme
en lo más hondo de mi corazón