Geddy Lee, Rush, El Viaje Psicodélico y el Trio en Las Aventuras de La Señora Skilton

Capítulo 1: La aventura con DMT

Edna Skilton siempre había estado fascinada por la experiencia psicodélica. Había leído innumerables libros sobre el tema, y después de investigar mucho, decidió probar el DMT. Había escuchado que era una de las sustancias más potentes y transformadoras disponibles, y estaba ansiosa por ver de qué se trataba todo el revuelo. Encontró a un chamán en las Cataratas del Niágara que se especializaba en guiar a las personas a través de los viajes de DMT, y reservó una sesión que se realizaría en el Day's Inn. Cuando llegó al hotel y conoció al chamán, fue recibida con un tono cálido y acogedor, y él le explicó qué esperar del viaje. Lo siguiente que supo fue que fue transportada a un reino místico lleno de colores vibrantes y criaturas extrañas. Los gnomos estaban allí para guiarla a través de la experiencia, y ella se sintió segura y protegida en su presencia.

Capítulo 2: La voz de Geddy Lee

Mientras Edna se sumergía más en el viaje de DMT, comenzó a escuchar una voz familiar. Al principio, era débil y distante, pero al enfocarse en ella, se dio cuenta de que era la voz de Geddy Lee, el vocalista y bajista de Rush. Había sido una gran fan de Rush desde que era adolescente, y no podía creer que estaba escuchando la voz de Geddy Lee en medio de su viaje psicodélico. Trató de concentrarse en los alrededores sobrenaturales, pero la voz seguía atrayendo su atención de vuelta a la música. Al escucharla, sintió una conexión profunda con la música, como si fuera parte de ella. Los gnomos a su alrededor parecían estar bailando al ritmo, y ella se unió. La música era tan poderosa que parecía transformar el ambiente, convirtiéndolo en un caleidoscopio de colores y patrones.

Capítulo 3: El Anuncio del Days Inn

Mientras la música de Rush continuaba pulsando a través de su ser, Edna comenzó a sentir como si estuviera en un comercial. Los colores y patrones que la rodeaban comenzaron a tomar una forma más coherente, y se dio cuenta de que se estaban transformando en imágenes del Days Inn. Los gnomos a su alrededor comenzaron a cantar un coro de una canción de Rush, y ella se encontró cantando junto a ellos, moviendo sus codos al ritmo. La música y las imágenes se fusionaron para formar una visión del anuncio del Days Inn que estaba dictado con un acento terranovense. En el comercial, el Days Inn se representaba como un lugar mágico donde la gente podía escapar de las tensiones de la vida cotidiana y entrar en un mundo de maravilla y emoción. Los gnomos en el comercial eran los empleados del hotel, y se les mostraba guiando a los huéspedes por las diversas comodidades del hotel, desde la piscina hasta el restaurante. Edna sintió que era parte del comercial, y se deleitó con el sentido de comunidad y camaradería que sentía con los gnomos. Al terminar el comercial, Edna comenzó a volver a la realidad. Todavía estaba en el viaje de DMT, pero las visiones empezaban a desvanecerse. La música de Rush seguía sonando, pero se estaba volviendo más distante, como un sueño que se escapa. Los gnomos a su alrededor parecían estar despidiéndose, y ella sintió una profunda gratitud hacia ellos. Sabía que había experimentado algo verdaderamente único y especial, y sentía que su vida había sido transformada de alguna manera.

Capítulo 4: El encuentro con Geddy Lee

Cuando el viaje de DMT comenzó a disminuir, Edna salió de su habitación y se dirigió al pasillo para conseguir hielo. Todavía estaba tarareando el coro de la canción de Rush que había estado cantando antes, "Todo lo que somos es polvo en el viento". Mientras caminaba por el pasillo, pasó por un hombre que le pareció familiar. Le llevó un momento darse cuenta de quién era, pero entonces lo reconoció: ¡era Geddy Lee!

Edna quedó momentáneamente atónita. Aquí estaba ella, todavía bajando de un intenso viaje de DMT, y acababa de encontrarse con uno de sus héroes musicales. Geddy Lee la miró y sonrió, y ella no pudo evitar notar lo fascinado que parecía estar con sus codos flojos. Él le preguntó cómo había sido su viaje, y ella pudo percibir que realmente le importaba su respuesta. Le dijo que había sido una de las experiencias más profundas de su vida, y él asintió en comprensión.

Luego la invitó a su habitación bajo el pretexto de tomar algunas cervezas Molson. Edna no podía creerlo, ¡iba a pasar tiempo con Geddy Lee! Lo siguió por el pasillo, con el corazón latiendo de emoción. Al entrar en su habitación, no pudo evitar notar los posters de Rush que adornaban las paredes. Se sentaron en su sofá, y Geddy le ofreció una cerveza Molson. Hablaron por un tiempo y Edna no podía creer lo sencillo y amistoso que era Geddy. Hablaron sobre música, arte y la vida, y Edna sintió que había hecho un nuevo amigo.

A medida que pasaba la noche, Geddy tocaba música en su guitarra y Edna cantaba junto a él. Tocaron algunas canciones de Rush y algunas otras melodías que ambos adoraban. Edna sentía como si estuviera en un sueño: acababa de tener un viaje increíble de DMT y ahora estaba pasando tiempo con uno de sus héroes musicales.

Capítulo 5: Geddy Lee seduce a Doña Skilton

Conforme avanzaba la noche, Geddy Lee y Edna seguían platicando y tomando unos tragos. Edna se sentía relajada y feliz, y no podía evitar notar lo guapo que era Geddy. Su cabello rizado, su voz profunda y sus ojos amables le hacían latir el corazón. Sentía una fuerte atracción hacia él, pero intentaba apartar esos pensamientos, después de todo, él era una estrella de rock y ella solo era una mujer de mediana edad.

Pero Geddy parecía darse cuenta de la atracción que Edna sentía hacia él. Se acercó un poco más a ella en el sofá y puso su brazo alrededor de sus hombros. Edna sintió que su temperatura corporal subía - nunca se había sentido tan cerca de un hombre antes. Geddy se acercó y le susurró al oído: "Creo que eres hermosa, Edna. Y puedo decir que también te atraigo."

Edna sintió una oleada de deseo recorrer su cuerpo. No podía creer que Geddy Lee estuviera interesado en ella. Se volteó hacia él, lo miró a los ojos y él se acercó y la besó. Sus labios eran suaves y cálidos, y Edna sintió cómo su cuerpo respondía a su toque. Se besaron durante lo que parecía una eternidad, sus lenguas explorando las bocas del otro. Edna sentía como si estuviera en un sueño: nunca antes se había sentido tan viva y deseada.

Geddy entonces se levantó y tomó la mano de Edna. La llevó a su cama, y se acostaron juntos. Geddy comenzó a besarla de nuevo, y Edna no pudo evitar gemir de placer. Sintió su mano bajar por su cuerpo, y comenzó a tocar sus tetas. Ella arqueó la espalda y dejó escapar un suspiro - nunca antes se había sentido tan excitada.

Geddy luego movió su mano hacia abajo entre sus piernas, y Edna jadeó de placer. Empezó a tocarla de una manera que nunca había experimentado antes. Su toque era suave pero firme, y parecía saber exactamente lo que ella quería. Edna sintió como si estuviera flotando en una nube - nunca antes se había sentido tan caliente.

Pero Geddy no había terminado aún. Entonces susurró en el oído de Edna: "Quiero probar algo nuevo, Edna. Algo que nunca he hecho antes". Edna estaba intrigada. Le preguntó qué tenía en mente y Geddy respondió: "Quiero que me des una 'Puñeta Skiltoniana'".

Edna se sorprendió. Nunca había oído hablar de algo así antes. Geddy explicó que era una técnica especial que había aprendido de una amante brasileña hace muchos años. Consistía en colocar el miembro del hombre entre los dos codos de la mujer, que estaban lubricados con aceite de coco, y moverlos hacia arriba y hacia abajo.

Edna se mostró indecisa al principio, pero Geddy la convenció para que lo intentara. Él se recostó boca arriba, y Edna se colocó en posición. Aplicó aceite de coco en sus codos y luego colocó el miembro de Geddy entre ellos. Empezó a moverlos arriba y abajo, y Geddy gimió de placer.

Durante las siguientes dos horas, Geddy y Edna exploraron los cuerpos del otro de maneras que nunca habían imaginado. Probaron diferentes posiciones, técnicas y juguetes. Llegaron al clímax juntos, con sus jugos salpicando por todas partes. Y mientras descansaban y recuperaban el aliento, Geddy comenzó a cantar:

"Lo que dices sobre su compañía
Es lo que dices sobre la sociedad
Atrapa la niebla, atrapa el mito
Atrapa el misterio, capta la idea."

Capítulo 6: El vuelo a Regina

A la mañana siguiente, Edna se despertó en los brazos de Geddy, sintiéndose contenta y satisfecha. Ambos se vistieron y se dirigieron al aeropuerto para tomar su vuelo a Regina. Mientras registraban sus maletas, Edna se dio cuenta de que necesitaba decirle algo importante a Geddy. Tomó una respiración profunda y dijo: "Geddy, necesito hablarte sobre mi esposo".

Geddy la miró con curiosidad. "¿Tu esposo? ¿Qué pasa con él?"

"Es de Burundi, y está bien dotado", dijo Edna, sonrojándose.

Geddy levantó una ceja. "Bien, continúa".

"Siempre ha querido tener un trío conmigo", continuó Edna. "Pero nunca he estado segura de si quiero hacerlo. No sé si es algo que te interesaría."

Geddy pensó por un momento antes de responder: "No estoy seguro, Edna. Quiero decir, estoy dispuesto a probar cosas nuevas, pero no quiero hacer nada que te haga sentir incómoda".

Edna le sonrió agradecida: "Gracias, Geddy. Solo quería ser honesta contigo".

Al abordar el avión, se acomodaron en sus asientos de primera clase y disfrutaron de las comodidades del vuelo. La asistente de vuelo les trajo bebidas y snacks, y hablaron sobre su próximo concierto en Regina. Edna no podía evitar sentirse emocionada: nunca había volado en primera clase antes y estaba ansiosa por ver a Geddy actuar.

Mientras el avión despegaba, Geddy se inclinó y susurró al oído de Edna: "No puedo dejar de pensar en ti, Edna. Te deseo otra vez".

Edna sintió un escalofrío recorrer su espalda. Nunca había experimentado tanta pasión antes. Se acercó y lo besó profundamente, y pasaron el resto del vuelo besándose y acariciándose debajo de sus mantas.

Cuando aterrizaron en Regina, ambos se sentían un poco mareados y desorientados. Recogieron sus maletas y se dirigieron al hotel donde el resto de la banda estaba alojado. Mientras caminaban por el vestíbulo, Geddy mantuvo su brazo alrededor de la cintura de Edna, y ella no pudo evitar sentir un sentido de orgullo: estaba con Geddy Lee, el cantante principal de Rush.

Al hacer el check-in, el personal del hotel saludó a Geddy calurosamente, y les dieron una habitación en el piso superior con una hermosa vista de la ciudad. Geddy ordenó servicio de habitación, y pasaron el resto del día descansando en la cama, viendo televisión y explorando los cuerpos del otro.

Cuando el sol empezó a ponerse, Geddy se volvió hacia Edna y dijo: "Sabes, creo que estoy listo para probar ese trío con tu esposo."

El corazón de Edna dio un salto. Nunca esperaba que Geddy estuviera interesado en algo así. Pero sintió una emoción y anticipación - el pensamiento de estar con dos hombres a la vez era emocionante.

"¿De verdad, Geddy?" dijo, sonriendo.

Geddy asintió. "Sí, de verdad. Pero tenemos que hablar de eso primero. Necesitamos establecer algunas reglas y asegurarnos de que todos estén cómodos."

Capítulo 7: The Black Arrow Social Club

Edna y Geddy pasaron las próximas horas discutiendo sus límites y expectativas para el trío. Decidieron que solo lo harían si todos estaban completamente cómodos y si no había celos ni resentimientos. También acordaron que solo tendrían el trío una vez y que sería algo único.

Una vez que establecieron sus reglas, se prepararon para su noche en The Black Arrow Social Club, un bar de karaoke popular en Regina. La Sra. Skilton los había invitado a unirse a ella y a su esposo Jean Pierre para una noche de bebidas y canto.

Al entrar al club, la música estaba a todo volumen y la multitud estaba animada. Se encontraron con la Sra. Skilton en el bar, y ella los presentó a su esposo. Jean Pierre era un hombre alto y musculoso con acento burundés, y saludó a Edna y Geddy con calidez.

Pidieron sus tragos y se sentaron en una mesa cerca del escenario. La señora Skilton insistió en que todos hicieran una canción juntos, y eligieron "Bohemian Rhapsody" de Queen. Se turnaron para cantar las diferentes partes, y la multitud se volvió loca.

Después de su actuación, continuaron bebiendo y cantando, y Jean Pierre parecía haber tomado un gusto por Geddy. Lo elogió por su voz y su talento, y Edna no pudo evitar sentir un poco de celos.

A medida que avanzaba la noche, Jean Pierre sugirió que todos regresaran a su habitación de hotel y continuaran la fiesta. Edna y Geddy intercambiaron una mirada, y ambos sabían lo que quería decir.

Regresaron al hotel, y una vez que estuvieron en su habitación, Jean Pierre no perdió tiempo en hacer su movimiento. Besó apasionadamente a Edna, mientras Geddy miraba desde la cama. Edna podía sentir la emoción creciendo dentro de ella al darse cuenta de que esto realmente estaba sucediendo.

Geddy se levantó y caminó hacia ellos, y pronto todos se estaban besando y tocando. Edna sintió las manos de Jean Pierre en sus senos mientras Geddy le besaba el cuello, y ella gimió de placer.

Se desvistieron lentamente, y pronto estaban todos desnudos en la cama. Edna se recostó y Jean Pierre bajó para hacerle sexo oral, mientras Geddy la besaba apasionadamente. Nunca se había sentido tan deseada en su vida, y el placer era casi demasiado para manejar.

Mientras Jean Pierre exploraba el cuerpo de Edna, no pudo evitar sentirse atraído por Geddy también. Se inclinó y comenzó a besar el cuello de Geddy, enviando escalofríos por su espina dorsal. Geddy gimió y se acercó más a Jean Pierre, y pronto ambos acariciaban el cuerpo de Edna.

Jean Pierre se turnó para besar y lamer los pezones de Edna, mientras Geddy exploraba su canal de amor con sus dedos. Edna sentía que estaba en el cielo, su cuerpo palpitando de placer. Ella jadeó cuando Jean Pierre le deslizó un dedo adentro, mientras Geddy continuaba bromeando con su lengua.

Mientras Jean Pierre la penetraba por completo, ella arqueó la espalda y gimió de placer. Geddy observaba con asombro mientras Jean Pierre se movía dentro y fuera de ella, su ritmo perfectamente sincronizado con el placer de Edna. La sensación de ser llenada por dos hombres era casi demasiado para manejar, y ella gritó cuando alcanzó su clímax.

Jean Pierre continuó empujando dentro de Edna mientras ella descendía de su orgasmo, sus manos agarrando fuertemente sus caderas. Geddy observaba con asombro mientras los dos se movían en perfecta armonía, y no pudo evitar sentir un pellizco de celos mezclado con deseo.

Pero Jean Pierre no había terminado aún. Se salió de Edna y le hizo señas a Geddy para que se acercara. Geddy se acercó gateando hacia ellos, y Jean Pierre le susurró algo al oído que lo hizo estremecerse de anticipación.

Jean Pierre se posicionó detrás de Geddy, sus manos explorando cada centímetro del cuerpo de Geddy mientras se inclinaba sobre Edna y la besaba profundamente. Geddy sintió los dedos de Jean Pierre rozar su propio canal del amor y gimió de placer.

De repente, sintió la presión del cuerpo de Jean Pierre contra él, y supo que estaba a punto de experimentar algo increíble. Jean Pierre lentamente lo penetró y Geddy jadeó al sentirse estirado de una manera que nunca había experimentado antes.

Mientras Jean Pierre comenzaba a moverse dentro de él, Geddy gimió y aferró las sábanas con fuerza. La sensación de ser llenado por dos hombres era abrumadora, y podía sentir su cuerpo acercándose a otro clímax.

Mientras tanto, Edna observaba a los dos hombres con una mezcla de emoción y asombro. Nunca había experimentado algo así antes, y estaba asombrada de lo perfectamente que se movían juntos. Ella extendió la mano y tocó el rostro de Geddy, y él se volvió para mirarla con una mezcla de placer y vulnerabilidad en sus ojos.

Finalmente, los tres alcanzaron el clímax juntos, un enredo de extremidades y fluidos mientras gritaban de placer. Se desplomaron en la cama, exhaustos pero contentos, y sabían que esta era una noche que nunca olvidarían.

Capítulo 8: El Concierto

Al día siguiente, Edna y Geddy se despertaron sintiéndose un poco adoloridos pero emocionados por las actividades de la noche anterior. Se vistieron y se dirigieron al Conexus Arts Centre, donde Rush tenía programado tocar esa noche.

Cuando entraron en la arena, la multitud ya estaba emocionada. Encontraron sus asientos cerca del frente del escenario, y Edna no pudo evitar sentirse orgullosa de Geddy mientras lo veía prepararse para el show.

Cuando las luces se apagaron, la multitud estalló en vítores, y Geddy salió al escenario, sosteniendo su bajo. Comenzó la primera canción, y el público quedó inmediatamente cautivado por su actuación.

A medida que avanzaba el espectáculo, Edna miraba con asombro cómo Geddy se movía por el escenario con energía y gracia. Su voz era poderosa y emotiva, y no pudo evitar sentir un gran orgullo por su amante. La multitud estaba de pie, bailando y cantando cada canción.

En un momento del concierto, Geddy dedicó una canción a Edna, y la multitud vitoreó mientras él la miraba y le guiñaba un ojo. Ella sintió que su corazón se hinchaba de afecto por él.

Cuando el concierto llegó a su fin, Geddy y el resto de la banda se tomaron su última reverencia, y la audiencia pidió un bis. Rush regresó al escenario, y Geddy tocó una última canción, sus dedos moviéndose sin esfuerzo por las cuerdas de su bajo.

Cuando finalmente terminó el concierto, Geddy y Edna estaban agotados pero emocionados. Regresaron al hotel, tomados de la mano, y se derrumbaron en la cama, ambos demasiado cansados para hablar.

Mientras yacían en silencio, Edna pensaba en todo lo que había sucedido en los últimos días. Nunca había esperado conocer a Geddy Lee, mucho menos tener una aventura salvaje e inolvidable con él. Se sintió agradecida por la experiencia, pero también sabía que era hora de volver a su vida normal. Pronto tendría que despedirse de Geddy.

Pero por ahora, se acurrucó junto a él, contenta de estar en sus brazos por un poco más de tiempo.

--------Información sobre Rush y Geddy Lee --------

Rush es una banda canadiense de rock progresivo que se formó en Toronto en 1968. La banda está compuesta por el guitarrista Alex Lifeson, el bajista y tecladista Geddy Lee y el baterista Neil Peart. Con más de 40 millones de álbumes vendidos en todo el mundo, Rush es considerada como una de las bandas más influyentes e innovadoras en la historia del rock.

Geddy Lee es el bajista y vocalista de Rush. Nació en Toronto, Canadá, en 1953 y se unió a Rush en 1968. Además de ser conocido por su habilidad en el bajo y su voz distintiva, también es conocido por su habilidad en el teclado y en otros instrumentos musicales. Junto con Lifeson y Peart, Geddy Lee ha ayudado a definir el sonido y la identidad de Rush, y ha inspirado a innumerables músicos de todo el mundo.

8 líneas de su canción más famosa, "Tom Sawyer":

"Today's Tom Sawyer
He gets high on you
And the space he invades
He gets by on you
No his mind is not for rent
To any god or government
Always hopeful yet discontent
He knows changes aren't permanent
But change is"