SCIOS_2ES

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ACTA DE RENDICIÓN (SEGUNDA PARTE)
Por: Adam Wieser
Superada en número y armamento, la Comandante Wallace intenta defender a Crion del inminente ataque Tevarin.
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La tripulación de la Crescent se apresuró a las estaciones de batalla. Los hombres de las estrellas, sobresaltados por el inesperado anuncio de enemigos de Tevarin, ahora salían de las habitaciones de la tripulación. Los ingenieros verificaron dos veces las plantas de energía y las bahías de baterías de la nave para asegurarse de que todo el jugo estuviera en línea.

El puente zumbó alrededor de la comandante Wallace. De alguna manera esto se sentía familiar y completamente extraño para ella. Ella había estado en batallas antes, pero nunca a cargo de una. Había visto de primera mano la destrucción en Virgilio I las columnas de humo que se elevaban de campos anteriormente verdes, el bombardeo orbital creaba los únicos restos de lo que una vez fue una metrópolis emergente.

El comandante Wallace había visto hasta dónde llegarían los Tevarin para ganar esta guerra. No podía dejar que el mismo destino le sucediera a Crion.

"Comandante, se ha enviado una advertencia a Crion", El Oficial Coburn se colocó a su lado, con una libreta de datos personales en la mano.

"Bueno."

"También enviamos un avión no tripulado a la flota principal, aunque hay una buena posibilidad de que no lo reciban a tiempo para marcar la diferencia".

"Es por eso que debemos hacer todo lo posible para reducir la velocidad".

Coburn asintió y luego continuó: “Una última actualización, señor. El prisonero Lime llegó al bergantín. A Paredes se le ha asignado la primera vigilancia.

El prisionero Lime, que se hacía llamar Hickory, había pasado a la mente de la comandante Wallace. ¿Y si Lime tenía razón? ¿Qué pasaría si él tuviera el Instrumento de rendición en su nave, y esta guerra finalmente hubiera terminado? El esperado dron de comunicación del comando de ayer nunca llegó. Puede ser una coincidencia; Puede que no. Lime tenía razón acerca de que los Tevs estaban en el sistema. Había una posibilidad de que él estuviera diciendo la verdad sobre esto también.

"¿Ya hemos localizado su nave?"

Coburn frunció el ceño, "No, señor".

"Avísame en el momento en que lo hagan".

"Por supuesto, comandante".

Aún así, no era algo en lo que arriesgaría la vida de millones. La gente como Lime siempre juega un ángulo; ¿Por qué si no él, un criminal buscado, abatiría su nave para dar un paseo?

"Señor, nuestros exploradores informaron que la flota de Tevarin ha entrado en el cinturón de asteroides".

La comandante Wallace cruzó a un terminal y superpuso la extensa red de sensores de alerta temprana del sistema en el hologlobo. Entrar al cinturón de asteroides significaba que no querían ser detectados. La medida se alineó con las muchas revisiones posteriores a la acción que había leído sobre otros ataques de Tevarin.

Cuando los Tevs atacaron objetivos civiles, lo hicieron con poca o ninguna advertencia. Prefirieron moverse silenciosamente, golpear fuerte y rápido, luego retirarse antes de que apareciera el apoyo. Cuando se ejecutó correctamente, los resultados fueron devastadores. Wallace sabía por Virgil que no hay mas sensación de impotencia que responder a un ataque que termina antes de que llegues.

La máquina de guerra de Tevarin se alimentaba del caos y las llamas del miedo. Corath’Thal incluso había grabado una serie de videos que a menudo se abrían paso en el Spectrum a través de transmisiones piratas. Los videos justificaron sus tácticas de guerrilla y excitaron a Messer por quitarles su mundo natal. Corath’Thal afirmó que ningún mundo humano estaba a salvo hasta que Jalan volviera a estar bajo el control de Tevarin.

“Coburn, los Tevarin están sacrificando la velocidad por el sigilo. Eso nos da la oportunidad de viajar cuánticamente por delante y establecer la defensa de Crion ".

“Lo hacen, señor. . ." Sus palabras se habían detenido, pero era obvio que tenía más que decir.

"Ahora no es el momento de detenerse".

Coburn miró a sus pies y luego prosiguió: "Incluso si corremos hacia Crion, nunca podremos establecer una defensa viable. No tenemos oportunidad de luchar contra ellos en espacios abiertos. Su fuerza es demasiado grande y el escudo de falange de su nave capital demasiado fuerte ".

La temperatura de su cuerpo se disparó cuando el nerviosismo salió de cada poro. Estaba segura de que todos en el puente podían sentir la tensión proveniente de ella. Esta no era la presencia calmante que el comandante de una nave debería proyectar.

Así que la Comandante Wallace cerró los ojos mientras su pulgar e índice apretaban el puente de su nariz. Tenía que haber otra forma, pensó, pero ¿qué opciones quedaban?

La comandante Wallace finalmente abrió los ojos y miró el holo-globo. Sus ojos se posaron en el cinturón de asteroides. Acercó el HoloGlobo al cinturón y observó a la flota de Tevarin atravesarlo lentamente.

Un silencio espeso se instaló sobre el puente. Nadie se atrevió a hablar mientras todos esperaban ansiosamente las órdenes.

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Más profundo en la Crescent, Hickory yacía en la litera del bergantín, contando. El chico que lo vigilaba había estado caminando desde que la celda se cerró de golpe. Se movía de un lado a otro del pasillo con una precisión tan molesta que era difícil no contar. Cada 25 segundos de sangrado, pasaba por la ventana de la celda con esa expresión severa en su rostro que Hickory atribuía a la sobrecompensación.

El chico tenía que saber que había sido cargado con una tarea de mierda. Todos los demás soldados en la nave se estaban preparando para asar y eliminar Tevarins y aquí estaba el atrapado vigilando a un humano. El joven estelar nunca se convertiría en un héroe atrapado vigilando el bergantín, o al menos, eso es lo que Hickory necesitaba para convencerlo. Cualquier cosa para obtener más de 25 segundos de tiempo a solas. Hickory necesitaba tiempo para trabajar.

Hickory miró hacia la puerta de la celda. Había trabajado con algunas cerraduras electromagnéticas en su día. Primero había abierto una puerta de celda, muy parecida a esta, en Olympus. De hecho, muchos de estos pasillos se sentían vagamente familiares. Si su presentimiento era correcto y este era el mismo tipo de nave UEE que se estrelló contra Ashana, significaba que Hickory sabía cómo encontrar el hangar.

Por supuesto, primero tendría que salir de esa celda. Entonces podría preocuparse por cómo llegar discretamente al hangar mientras la nave se preparaba para la batalla.

Hickory bajó los pies al suelo y se enderezó. Detrás de su espalda, sus dedos se clavaron dentro de la manga derecha de su traje espacial, y encontraron la cremallera secreta escondida cerca de una costura. Con cuidado, abrió el bolsillo oculto y sacó una herramienta múltiple en miniatura.

Espera, se había concentrado tanto en extraer la herramienta que había perdido la cuenta. De repente, el niño apareció ante su celda.

"Bueno, mira quién finalmente se a levantado".

Sorprendidos, los dedos de Hickory juguetearon con la herramienta múltiple casi dejándola caer de su manga. "Quiero estar listo cuando lleguen los Tevarin", dijo Hickory mientras arqueaba la espalda y aseguraba su herramienta múltiple.

"No te preocupes. No llegarán tan lejos. No conmigo y mis compañeros en el camino."

"Has visto mucha acción contra los Guerreros de Rijora, ¿verdad?"

El marine movió nerviosamente su peso de un pie al otro.

"Es lo que pensaba."

"Sí, bueno, ¿qué sabes de ellos?"

"No puedo admitir haber luchado contra ningún Tevarin, nunca me han dado motivo para hacerlo".

"Deberías estar avergonzado de llamarte humano".

"No te preocupes, estoy lejos de ser comprensivo. Simplemente no peleo con todo lo que está en juego. Están demasiado desesperados, impredecibles. Nunca se sabe lo que harán para sobrevivir ".

Hizo una pausa para lograr un efecto dramático.

"Así que yo agarraría más munición si fuera tú. Porque si algunos pájaros bélicos entran corriendo por la puerta hacia ti, no es que pueda ayudarte ".

El niño consideró su posición, luego giró y caminó con precisión por el pasillo. Hickory maldijo por lo bajo. Demasiado para convencerlo de que se vaya. Supongo que tendría que ir a la cerradura lenta y constantemente.

Una vez más, apareció el niño, luego bajó por el pasillo. Hickory comenzó a contar mientras cruzaba silenciosamente el piso de la celda para arrodillarse junto a la puerta. Sus dedos derechos sacaron una pequeña broca de su herramienta múltiple. Su mano izquierda sintió el metal gris estéril que envolvía el gran imán de la puerta. Su ancho era ligeramente más pequeño que su mano.

Hickory cambió la herramienta múltiple a su mano izquierda, luego presionó la broca en el centro de la carcasa de metal. Su reloj interno dio las 20. No es necesario probar los límites la primera vez.

Hickory rápidamente se acercó a la litera y se sentó con las manos detrás de la espalda a las 25. El niño llegó como estaba planeado. Hickory no pudo evitar sonreír cuando los nerviosos ojos del niño miraron en su dirección.

Luego se fue de nuevo. La herramienta múltiple cortó en su traje espacial justo debajo de la línea del puño izquierdo, dejando al descubierto un pequeño puerto que aprovechaba la energia del traje.

Hickory conectó la herramienta múltiple en el puerto y luego movió las manos a la espalda. El niño vino y se fue, pero Hickory se quedó sentado, respirando profundamente. Dejando que la herramienta múltiple se recargue antes de continuar con su escape.

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LA comandante Wallace miró a la flota Tevarin en el holo-globo. Su ícono no se había movido por un tiempo. Ninguno de los dos tenía el marcador de su explorador que acechaba a la flota.

"Darsha, ¿nuestra alimentación sigue viva?"

"Sí señor."

"Póngase en contacto con las naves de reconocimiento, vea si saben por qué la flota Tevarin esta estacionaria".

"Sí comandante."

Mientras esperaba una respuesta, el comandante Wallace avanzó lentamente y luego invirtió el tiempo en el holo-globo, observando que la composición del cinturón de asteroides cambiaba ligeramente. Nuevas áreas libres de asteroides aparecieron repentinamente o desaparecieron a medida que los objetos más cercanos a la estrella orbitaban un poco más rápido que aquellos cerca del borde exterior. Entonces vio algo extraño.

Al principio pensó que era un problema técnico. Ella invirtió tiempo en el holo-globo y luego se percato. Ahí estaba de nuevo. Posicionado demasiado cerca de la flota Tevarin esperando para ser una coincidencia.

Un espacio relativamente recto a través del cinturón.

La comandante Wallace comprobó la marca de tiempo. De acuerdo con esto, el cinturon caería en esta alineación en 45 minutos antes de desaparecer nuevamente 15 minutos más tarde.

"Odorizzi, ¿qué tan precisos son estos escaneos?"

"Uhhh. . . las estimaciones muestran que están operando con una precisión del 93%, señor ".

Los engranajes del comandante Wallace comenzaron a girar.

"¿Comandante?" Darsha llamó desde la estación de comunicaciones. "Nuestro explorador informa que no hay indicios de por qué la flota Tevarin se ha detenido".

Los ojos del comandante Wallace volvieron a su ícono.

Un plan tomó forma en su cabeza. Finalmente vio la oportunidad de enfrentarse a los Tevarin en condiciones favorables.

“Odorizzi, ¿ves este punto aquí? En 44 minutos se abrirá una brecha allí. Use sus coordenadas precisas.

"Sí, señor", respondió Odorizzi.

"Timonel Ayers, una vez que Odorizzi haya terminado, alinee a la Media Luna para viajar cuánticamente directamente a esa brecha".

El timonel Ayers compartió una mirada nerviosa con Coburn y luego habló con cautela: "¿Disculpe, comandante?"

Coburn rápidamente se colocó a su lado, "Señor, podría ser útil hablarnos de sus intenciones".

El comandante Wallace miró a Coburn. No tuvieron mucho tiempo para poner en marcha su plan. Casi le recordó quién dio las órdenes a bordo de Crescent, pero se contuvo. Ella miró alrededor del puente. El resto de la tripulación evitó su mirada. Necesitaba el apoyo de Coburn ahora más que nunca.

“En exactamente 43 minutos, las órbitas variables de los asteroides en este cinturón se alinearán de tal manera que aparecerá un gran espacio completamente a través del cinturón. Actualmente, las fuerzas de Tevarin mantienen su posición cerca de esa área. Solo podemos suponer que están esperando esta brecha. Una vez que aparezca, maniobrarán en la brecha y luego saltarán cuánticamente a la puerta de Crion ".

Un murmullo se extendió entre la tripulación del puente. El comandante Wallace dejó que las voces se asentaran y luego continuó: "No podemos permitir que eso suceda. Entonces, esto es lo que vamos a hacer. Coburn, ordena a todos nuestros exploradores que se reúnan cerca de esta brecha de inmediato ".

"¿Todos los exploradores, Comandante?"

El comandante Wallace hizo una pausa y luego asintió. La historia de Hickory fue remota, y esta amenaza Tevarin era real. El explorador que busca su nave sería mejor utilizado aquí.

"Todos ellos. Quiero minas de interdicción de proximidad colocadas a ambos lados de donde aparecerá la brecha, aproximadamente a la mitad. A medida que se acerquen los Tevarin, las minas detonarán, creando una pared de escombros que detendrá su nave. Esa es nuestra oportunidad. En el momento en que esas cargas explotan, timonel Ayers, nos llevas al fondo de esa brecha. Mientras los Tevs están ocupados con lo que está delante de ellos, nos colaremos por detrás y atacaremos su popa ".

La comandante Wallace escaneó a su tripulación. El timonel Ayers miró a Odorizzi, quien lo instó a decir: “Comandante, ¿está seguro? El tiempo necesario para ejecutar un QT en un cinturón móvil, sin mencionar el riesgo de asteroides perdidos, es problemático por decir lo menos, si no es peligroso ”.

"El comandante Wallace no estaba buscando opiniones o excusas, Ayers", bramó Coburn.

El timonel Ayers se puso rígido. "No señor."

"Bueno. Ahora vamos a trabajar. Tenemos algunos Tevs que sorprender ".

Cuando el puente cobró vida, Coburn se colocó a su lado. Ella se encontró con su mirada y sintió que la confianza y la experiencia irradiaban de él. Era exactamente lo que ella necesitaba.

Coburn se acercó y habló con una voz que solo ella podía oír: "Un mejor trabajo sangriento".

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Drahk y Tajhbind se sentaron en su Jackal, a oscuras excepto por su escáner. Ellos, junto con el resto de los exploradores Tevarin, fueron colocados como centinelas alrededor de la nave principal Tevarin. Todos esperando pacientemente a que aparezca la brecha para poder golpear a Crion.

Drahk recitó en voz baja versos del Rijorian mientras miraba los escaneos. Tajhbind miró desde la cabina, aparentemente en paz. Drahk siempre se preguntó a dónde iba la mente de Tajhbind en momentos tranquilos como este.

Todo volvió a la normalidad entre ellos después de que Tajhbind convenció a Drahk de no ser voluntario para la primera fuerza de ataque. Una vez instalado en el Jackal, Drahk se dio cuenta de que Tajhbind tenía razón. Su decisión de ofrecerse como voluntario para una tarea inadecuada para él fue impulsiva y nublada por las emociones. Esperaba ser más considerado y paciente en la acción.

Mientras Drahk volvía su atención a los escáneres, vio un extraño bulto moviéndose por la pantalla. Drahk aumentó el alcance de sus escaneos y observó cómo el blip se tejía alrededor de los asteroides. Ciertamente era una nave y definitivamente no una de las suyas. Esos miserables humanos finalmente se habían mostrado.

"Tajh, hay algo avanzando. Veamos de qué se trata ".

Tajhbind cautelosamente pilotó el Jackal en esa dirección. A medida que se acercaban, la mancha giraba lentamente hacia ellos. Drahk levantó la vista para ver un pequeño círculo de nave humana detrás de un gran asteroide.

Tajhbind disparó una salva desde el Jackal. La nave humana se alejo cuando el asteroide a su lado fue destrozado.

"Vamos", llamó Drahk, casi instintivamente. "¡No dejen que se vayan!"

Tajhbind puso en marcha los motores del Jackal y se fue alrededor de un asteroide después de la nave. Con cada nuevo giro, Drahk ajustaba los escudos para que estuvieran protegidos si la nave Humana giraba para sorprenderlos con un ataque.

Delante de ellos, la nave humana hábilmente tejió su camino. Sin embargo, cuanto más lo perseguían, más se preguntaba Drahk sobre las intenciones de la nave. No había iniciado otro ataque ni siquiera había intentado maniobras evasivas para sacudirlos. En cambio, parecía contento con mantenerse fuera del alcance efectivo de las armas mientras los alejaba del resto de sus fuerzas.

Tajhbind giró el Jackal alrededor de un asteroide para ver la nave humana levantarse. Los ojos de Drahk lo siguieron, luego regresaron a los escaneos para ver dos nuevos puntos ante ellos.

"Hemos entrado en una trampa", llamó Drahk. Inmediatamente empujó todo el poder del escudo hacia adelante para resistir las explosiones de los nuevos atacantes. El escudo aguantó, pero necesitaría tiempo antes de recuperar toda su fuerza.

Tajhbind se deslizo hacia abajo, luego se lanzó hacia arriba y alrededor de un asteroide. La maniobra rápida y eficiente fue suficiente para poner al Jackal en la cola de una de las emboscadoras. Sin perder un segundo, Tajhbind disparó un misil y la destruyó. Una nave abajo.

Cuando Tajhbind los hizo girar a través de un apretado tirabuzon interior, Drahk vio una de las naves humanas restantes caer detrás de ellos. Reforzó el escudo de popa y luego buscó en el escáner la otra nave, no queriendo ser emboscado nuevamente.

La cabina del Jackal sonó con fuerza. El perseguidor humano había logrado el bloqueo de misiles. Drahk miró la carga de su escudo. Todavía no estaba completamente regenerado.

"Tajh, esquiva!"

El Jackal aceleró, y de repente se levantó. Sus alas rodaron hacia la derecha hasta lograr una alineación vertical. Luego apenas pasó entre dos asteroides. Cuando Tajhbind deslizó la nave entre estos dos pedazos gigantes de rocas y minerales, dejó caer algo de paja. El misil final explotó en los asteroides, saturando el área con un campo de escombros que la nave Humana no pudo evitar.

Drahk echó un vistazo a los escáneres para ver desaparecer la mancha de persecución, causada por el daño de los escombros. Eso dejó solo una nave, pero Drahk no pudo encontrarla en sus escaneos.

"¿Dónde está, Drahk?" imploró Tajhbind enérgicamente.

"No lo sé."

Tajhbind desaceleró la nave hasta que se detuvo. Los escaneos de Drahk permanecieron vacíos de enemigos. ¿Quizás el cobarde se había escapado, completamente consciente de su peligro?

Drahk verificó la fuerza del escudo y dio una actualización: "El escudo está totalmente alimentado".

De repente se encendió una señal.

"Ataque lateral severo", advirtió Drahk mientras redirigía los escudos a ese sector.

La nave humana se lanzó sobre ellos desde atrás, con sus dos cañones encendidos.

Tajhbind reaccionó instantáneamente, levantando la proa de la nave hasta que se volteó 180 grados. Ahora estaban al revés desde donde comenzaron. Los dos habían hecho la maniobra tan a menudo que Drahk sabía exactamente cuándo cambiar los escudos de adelante hacia atrás.

En el momento en que el arco se volteó, Tajhbind desató el fuego del infierno. Las dos naves se rompieron en los escudos del otro. El Jackal resistió el ataque mientras que el escudo de la nave Humana se hizo trizas rápidamente. Cuando la nave Humana se dio cuenta de que estaba en una batalla perdida, ya era demasiado tarde. Explotó segundos después.

Drahk y Tajhbind se sentaron allí en silencio por un momento. Lo habian hecho. Habían sobrevivido.

"Es hora de regresar y reportar nuestro encuentro", dijo Tajhbind.

Sin embargo, algo no estaba bien con Drahk. Revisó sus escaneos para ver que habían penetrado profundamente en el cinturón, pero todavía estaban cerca de donde aparecería la brecha. ¿Por qué tantas naves humanas convergerían por aquí cuando el resto de las fuerzas Tevarin estuvieran tan lejos? Su tiempo como joven en el Olimpo le había enseñado a Drahk que siempre era mejor sospechar de la traición de los humanos.

"No. No podemos regresar ", dijo Drahk con resolución. "No si queremos que el ataque a Crion tenga éxito".

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La actividad en el puente se detuvo y todos los ojos encontraron al comandante Wallace. Después de que Darsha informara que sus tres exploradores estaban bajo ataque, todos se volvieron hacia el holo-globo. Juntos habían visto desaparecer esos tres puntos, uno por uno. Toda la tripulación del puente conocía su destino, pero ninguno se atrevió a decirlo en voz alta.

Coburn dio un paso adelante, "Comandante, ¿cómo desea proceder?"

"¿Se han establecido las minas de proximidad?"

"Sí señor."

“Entonces solo tenemos una opción. Avanzamos según lo planeado ".

"Pero señor. . . " Coburn dudó y luego continuó. "No tendremos nuestros exploradores para confirmar que las fuerzas de Tevarin están en la brecha".

"No es lo ideal, pero sabremos que están allí una vez que se abre la brecha y los cargos detonan. Preparad el salto cuántico.

Coburn no se movió. Ninguno de los tripulantes del puente lo hizo. Wallace miró a su alrededor.

"Di una orden".

Todavía nada.

"No necesito decir qué harán esos Tevs si llegan a Crion. Probablemente hayas escuchado sobre eso. Algunos de nosotros hemos tenido la desgracia de verlo en persona ”, hizo una pausa para escanear los rostros de su tripulación. "Nos encontramos fuera de posición y en contra de números superiores, así que no voy a quedarme aquí para mentirte o prometerte la victoria". Podríamos morir hoy, pero no me impedirá luchar para salvar a millones de personas inocentes en Crion. ¿Os detendrá?

"¡No señor!" Se hizo eco al unísono.

Al otro lado del puente, su tripulación entró en acción. Después de un breve respiro, la comandante Wallace continuó: “Ahora, en exactamente tres minutos, esta brecha se abrirá y los Tevarin comenzarán su marcha para destruir a Crion. No importa qué, esas minas aún explotarán y el Tevarin se ralentizará. Pero lo único que realmente puede detenerlos es la Crescent. Entonces . . . ¿Quién está listo para atrapar a unos pocos Tevs? "

Se escuchó un rugido alrededor del puente.

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Drahk y Tajhbind observaron cómo la brecha se formaba lentamente ante ellos. Era un arreglo celestial tan peculiar que era difícil no mirar con asombro. Sin embargo, Drahk no se permitiría mirar. En cambio, se centró en sus escaneos para ver si había más fuerzas de la UEE al acecho.

Tajhbind se había puesto en contacto con los líderes para informarles sobre la situación. Su superior incluso los felicitó por la destrucción de los exploradores, y por la previsión de Drahk de continuar buscando la brecha.

Aún así, la falta de una nueva amenaza UEE desconcertó a Drahk. Casi sugirió expandir la búsqueda más profundamente en el cinturón, pero contuvo esa sugerencia. En cambio, se preguntó, ¿qué podrían haber esperado tres naves exploradoras para detener a una fuerza entera Tevarin?

De repente, los asteroides a ambos lados de la brecha explotaron. La metralla arrojó al Jackal por todos lados, abrumando sus escudos y golpeando su casco. Los impactos hicieron que la nave girara salvajemente. Drahk se aferró a su vida, esperando que Tajhbind pudiera recuperar el control antes de que ambos se desmayaran.

Tajhbind encendio los propulsores hasta que el giro disminuyó y la enfermedad de Drahk disminuyó. Verificó el estado de los sistemas de la nave ahora que podía concentrarse. Habían sufrido un daño significativo y necesitaban desesperadamente ayuda.

Drahk accedió al canal de emergencia y emitió una señal de socorro. De repente, un objeto masivo llenó la pantalla del escáner. Los ojos de Drahk se agrandaron. Solo puede ser una cosa.

Levantó la vista para ver una nave capital humana que bajaba por la brecha hacia ellos. Todavía incrédulo, Drahk anunció la llegada de los humanos a través del canal de emergencia. Luego dijo desesperadamente: "¡Tajh, debemos abandonar la nave!"

Drahk agarró su dispositivo de propulsión personal y se desató de su asiento. Con los escudos hacia abajo, solo sería cuestión de saltar de la parte trasera abierta de la nave y luego evadir a los asteroides hasta que se pudiera enviar ayuda.

De repente, el fuego de la torreta de la nave Humana cubrió el espacio delante de ellos. Instintivamente, Tajhbind alejó al Jackal de él, pero el daño anterior al ala izquierda fue demasiado. Arrancó el casco y envió la nave en picado hacia la gran nave, arrojando a Drahk hacia la parte posterior del Jackal y finalmente al espacio.

Una vez que Drahk se dio cuenta de lo que le había sucedido, activó los propulsores del dispositivo de propulsión personal hasta que estuvo bajo control. Buscó en el espacio a su alrededor, pero no había señales de Tajhbind. Solo la vista del Jackal herido y cayendo hacia un impacto con la enorme nave humana, con sus motores dañados lanzándolo salvajemente fuera de control.

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Hickory estaba a un paso de escapar de su celda. Había perforado un pequeño orificio en la caja de metal que albergaba el electroimán de la puerta, luego quitó cuidadosamente el puerto de alimentación en su manga izquierda para exponer los cables que lo conectan al resto de su traje. Todo mientras el niño seguía paseando por el pasillo.

Hickory comenzó la cuenta regresiva en su cabeza mientras cruzaba hacia la puerta de la celda por suerte la última vez. Necesitaba invertir la polaridad del electroimán para repeler la puerta de la placa de armadura integrada en la jamba. Pero él no sabría qué cable lo haría hasta que lo intentara.

La orquestación de esta última parte fue esencial. Hickory asumió que abrir la puerta activaría algún tipo de alarma. Entonces hacerlo demasiado pronto le daría al niño la oportunidad de reaccionar. Sin embargo, si esperó demasiado o eligió el cable equivocado, el niño podría atraparlo en el acto.

Cuando su reloj interno dio las diez, Hickory no tuvo más tiempo para debatir. Cogió un cable y guió su extremo expuesto hacia el agujero perforado, luego lo sostuvo en su lugar con la mano izquierda.

La cuenta regresiva golpeó cinco. . . cuatro. . .

La mano derecha de Hickory activó la mayor cantidad posible de sistemas de su traje. La electricidad zumbó a través del cable y dentro del electroimán. El niño apareció ante la celda justo cuando la puerta se abrió y emitió un fuerte pitido. El niño saltó hacia atrás, sorprendido.

Hickory agarró la puerta y la abrió. Lo último que quería era que el electroimán se volviera a conectar con la armadura. De repente, una alarma sorprendentemente fuerte sonó a través del bergantín, sorprendiendo tanto a Hickory como al niño.

Momentos después, una explosión sacudió la nave. Solo el agarre de Hickory en la puerta le impidió volar a través de su celda. El marine no fue tan afortunado. Fue arrojado por el pasillo, aterrizando con un ruido sordo.

Una vez que la Crescent se estabilizó, Hickory echó un vistazo fuera de la celda para ver al niño retorcerse de dolor. Hickory corrió por el pasillo hacia él. Al verlo venir, el niño luchó por levantar su arma. Hickory se la quitó de la mano.

El marine gritó de dolor. Hickory no podía dejar que hiciera más ruido, por lo que ladeó el brazo y dejó al niño fuera de combate.

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"¡Tajhbind!" Drahk uso impotente sus comunicadores. Todavía sosteniendo el dispositivo de propulsión personal, disparó sus propulsores hasta detenerse.

Silenciosamente, Drahk contempló un campo de escombros que se alejaba de la nave capital de la UEE. Era todo lo que quedaba del Jackal.

Aunque el destino de Tajhbind parecía claro, Drahk no estaba listo para aceptarlo, ya que hacerlo significaba lidiar con el suyo.

Drahk sabía que un rescate no sería posible desde esta posición. Tendría que usar EVA por el cinturón de asteroides y pronto. La nave capital de la UEE se acercaba cada segundo.

Drahk sintió que se dirigía hacia la nave, después de haber entrado en su campo gravitacional. Lentamente flotando hacia adelante, miró la nave. Le recordaba a su hogar en el Olimpo. Sentado en las dunas cuando era niño, mirando su enorme casco medio incrustado en arena, siempre había imaginado cómo se vería uno en el espacio. Y aquí estaba.

En cierto modo, había regresado a casa al final después de todo. Una sensación de paz se apoderó de él y un verso del Rijorian llenó su mente. Luego tuvo una epifanía: había sido traído aquí por una razón.

Los propulsores se encendieron en su dispositivo de propulsión personal, disparando a Drahk hacia adelante acumulando una gran velocidad. Si Drahk tenía alguna posibilidad de sobrevivir a esto, de ahora en adelante, sus propulsores solo deberían usarse para frenarlo.

Eso es, por supuesto, si la nave no acelera y choca contra él. Drahk dudaba que eso terminara bien para él.

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La comandante Wallace agarró la barandilla delante de ella. Las cargas habían detonado pero, además de la única nave que se estrelló contra ellos, las fuerzas Tevarin no estaban aquí. Al menos el daño del impacto parecía ser mínimo.

"Encuéntrame esa nave capital Tevarin de inmediato", gritó Coburn. "Necesitamos saber cuánto tiempo tenemos antes de que estén con nosotros".

Los ojos de Coburn se cruzaron con el comandante Wallace. Nunca lo había visto tan preocupado antes.

Espere . . . si saltaran cuánticamente..., podrían fácilmente saltar cuánticamente. Solo sería cuestión de dirigir la proa en la otra dirección.

"Comandante. . . " gritó Odorizzi.

Wallace miró el holo-globo. Su corazón se encogió en su estómago. Fue muy tarde.

Los Tevarin habían entrado en la brecha trás de ellos. La Crescent fue atrapada en su propia trampa, encajonada por un campo de escombros en un lado y la nave capital Tevarin en el otro. Antes de que el Comandante Wallace pudiera decir algo, el escudo de falange de Tevarin se encendió, listo para una pelea.

CONTINUARÁ ...
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- Enlace oficial:
    https://robertsspaceindustries.com/comm-link/serialized-fiction/17493-Instrument-Of-Surrender-Part-Two
- Traducido por RazielFireeye.