Te extraño
como las hojas
extrañan el roció
de la mañana

Te extraño
como la arena
extraña el mar
romperse en ella

Te extraño
como la tierra
extraña al sol
y a su luz

Te extraño
como la noche
extraña a la luna
cuando se esconde

Te extraño
como la lira
extraña su canción
que el oído endulza

Te extraño
como el poeta
extraña su pluma
cuando se inspira

Te extraño
tal cual el ave
extraña el cielo
cuando no vuela

Te extraño
tal cual oxigeno
extraña el cuerpo
al no respirar

-A. Aguilar